25 de junio de 2012

Salida día 30 de Junio: Río Grande de Jayena


Participantes: Jerónimo, Paco Ponferrada, Isabel, Ana, Manuel de Rincón, David, Lola Valle, Luci, Manuel de Nerja, Fali, Ricardo, Jesús

Distancia recorrida: 20 km
Desnivel acumulado: 500 m

Desayuno en El Nota de Jayena. Raciones grandes y muy bien atendidos. Se notaba el aviso de nuestro amigo Antonio de Fornes.
Felicidades a Manuel de Rincón que cumplió años la semana pasada y tuvo a bien invitarnos al desayuno.

Dice el refrán que “de los escaldados nacen los avisados” y todos sabemos que basta quemarse para no jugar con el fuego. Y ya vale de refranes que parezco Sancho Panza cuando le soltaba a su amo una retahíla de ellos. El caso es que el sábado pasado nos dimos una buena tunda y para este habíamos preparado una tranquila y, sobre todo, con agua para remojarnos. Así que decidimos ir al Grande que hacía años no visitábamos.

Partimos del Bacal por la garganta que el Grande forma a la entrada de la zona de acampada. En ella hay ya una senda bien marcada, cosa que no había, y una nueva tubería aérea para llevar el agua al Bacál. Lo menos que se puede decir de ella es que no se ha cuidado evitar el impacto visual. Para la nueva tubería se ha removido todo el cauce hasta la captación y ahora se camina por un carril hasta ella.

El cauce de la captación hacia arriba está como siempre, con su sendita paralela que cruza el río incontables veces, con su helechal de metro y medio de altura, con sus manantialillos aquí y allá y su bosque de ribera jalonando el curso del agua. El caudal era menor que otros años, consecuencia de la sequía que hemos padecido, pero suficiente para llenar pozas y sobre todo para alegrarnos el camino con su murmullo constante.

Había pocas flores así es que caminamos deprisa. Un poco antes del cerro de los Machos y de la poza Romanza la senda está casi desaparecida pero se pude pasar muy bien por el cauce seco. Pasamos por la poza Romanza sin detenernos, señal de que aún no habíamos acumulado suficiente calor, y tomamos un temprano Ángelus en la pinada del haza Grande de Córzola. Temprano, largo y frutal Ángelus donde los dulces invernales fueron sustituidos por piña, cerezas, uva y melón, todo muy fresquito y apetecible. En caminar no lo sé, pero en los detalles del condumio vamos mejorando sensiblemente. Tanto es así que no faltaron propuestas de quedarnos allí bajo la fresquita pinada, de charla hasta la hora de comer.

Alguien, no sé quién, se levantó diciendo que ya estaba bien y que había que seguir. Y con mejor o peor talante proseguimos para entrar en el valle del Almijara. Ricardo quería meternos por el barranco del Búho, pero el personal no estaba para investigaciones ni trepadas por las rocas, sino para un recorrido tranquilo amenizado por la charla. Proseguimos pues por el Almijara. Un par de águilas calzadas nos ofrecieron un bonito espectáculo de giros y picadas. Algo tenían en una parte de la ladera del cerro de las Golondrinas para seguir ese punto con atención y remontar el vuelo para volver a caer sobre el mismo sitio.

Ahí las dejamos con su fijación y atacamos el cortito repecho con el que termina el carrilillo en el más importante que sube por la cuesta de las Pulgas. Lo tomamos hacia abajo. La fuente del Retén ha desaparecido. Un corrimiento de tierras la ha sepultado. Tampoco teníamos esperanza de que hubiera manado agua en un año tan seco como este.

Llegados al Mojón de las Diferencias sacamos el mapa, lo consultamos cuidadosamente, y decidimos continuar por el carril que parecía iba al Oeste. No había duda. Al cabo de un buen trecho nos dimos cuenta que el carril iba en realidad hacia el Sur y que el arroyillo que llevábamos a la izquierda era el Almijara. Volvimos al Mojón de nuevo y enfilamos por el carril que parecía ir hacia el Norte pero que enseguida tomaba la Oeste. Para que se vea lo importantes que son los mapas en la montaña cuando se manejan la necesaria perspicacia.

La Almijara es increíble. Nos mete el carril por una zona de dolomías blanquísimas, casi desechas por lo cuarteadas, que no pueden retener agua alguna, que reflejan todo el sol, y allí estaban los pinillos poniendo su nota de verdor en esas empinadísimas laderas. Donde parecería que no podía crecer nada, ahí estaban los pinos resineros, los tomillos, romeros y alhucemas vegetando y componiendo un bonito paisaje junto a las extrañas rocas que la erosión ha modelado.

En el cruce de Cuatro Caminos giramos al Sur, al carril del valle del Golondrinas. La intención era ir a comer a la cascada y poza que el Golondrinas forma ya cerca de Córzola, pero el arroyo nos recibía completamente seco. Y seco continuó durante un buen trecho, cruzado por puentes de hormigón nuevos que se nos antojaban inútiles para un cauce tan seco, hasta que comenzamos a ver primero unas manchas de humedad en el fondo, después algunos charquitos, luego un pequeño hilillo y finalmente, poco antes de la cascada, un buen chorro de agua. El Golondrinas no nos había fallado.

La cascada está parcialmente destrozada. Ha perdido altura y suntuosidad, pero aún sigue bonita y llamativa cayendo en una poza verde esmeralda que invita al baño. Estábamos contemplándola desde lo alto del carril cuando Luci dio un respingo y se aparto conmocionada. Solo ella vio una enorme culebra entre unas matas de romero. Con los chistecillos sobre la culebra bajamos al cauce y nos metimos en la poza. El agua a 16,5ºC nos quitó el calor en pocos segundos. Ana y Ricardo fueron los que más aguantaron insensibles al frío que a los demás nos atería todo el cuerpo.

Comimos a la sombra de los pinos, en el mismo cauce, debajo de la poza. Estábamos enfrascados literalmente en la tarea de trasegar cuatro botellitas de tinto y las viandas que pasaban por doquier cuando oímos voces a nuestra espalda. Era una pareja que quería entrar en la poza en vez de por la sendita que nosotros habíamos utilizado, cruzando el arroyo por encima de la cascada e intentando ganar el cauce después. Se habían metido en un zarzal de consideración. Un par de almas caritativas del grupo les ayudaron a salir de aquel atolladero y en la poza los dejamos después de comer.

La siguiente parada fue la poza Romanza a la que llegamos por el cauce. Nos dimos un buen baño, con el agua ya a temperatura más agradable, 21ºC, y por el cauce abajo continuamos hasta después del cerro de los Machos mientras las ramas y la maleza nos lo permitió.

La siguiente parada fue poco antes de la captación. Otro buen baño del que salimos ya con suficiente humedad y frescura para llegar al Bacal.

Excelente día, con calor muy llevadero, y con la inestimable colaboración del río Grande y del arroyo Golondrinas que nos quitaron el calor siempre que hizo falta, ayudándonos a disfrutar de la Sierra y a pasar un día estupendo.


Empezando a caminar

Cruzando en Río Grande

Melanargia lachesis sobre Trachelium caeruleum

Río Grande

Pyronia bathseba

Oruga de Euchloe crameri

Catananche caerulea

Por el Haza Grande de Córzola

Blackstonia perfoliata

Por el carril hacia el Arroyo Golondrinas, con el Cabañeros al fondo

Baño en la poza del Arroyo Golondrinas

Natrix maura - Culebra de agua


Vencetósigo Vincetoxicum nigrum


Baño en la Poza Romanza


Cascada en la Poza Romanza

Centaurea granatensis con chinche

Poza en el Río Grande

Salto a la poza

12 comentarios:

Ana dijo...

Escribo mi frase favorita: "yo me apunto". Jerónimo,estoy pendiente a lo largo de la semana de la hora y el sitio que me indiques para quedar.

Anónimo dijo...

A ver si esta excursión nos resulta menos calurosa y dura. Estaré a las 7 en la plaza.
Jesús

Fali dijo...

Si el tiempo no lo impide allí estaré en la Plaza

Manuel del FPR dijo...

De vuelta por estas tierras estoy dispuesto a disfrutar de río.
Tras leer la magnífica crónica de Jesús de la salida última, me alegra no haber estado disponible para tal suplicio. El cuerpo me sigue pidiendo ejercicio y disfrute a la vez.
Estaré a la hora convenida en la plaza. Si se apuntan el resto de compis rinconeros, iremos en grupo.
Un abrazo montañero y veraniego
Manuel

Luci dijo...

Estare en la plaza a las 7.

Ana llamame por telefono que he perdido tu numero.

Anónimo dijo...

Me apunto estaré en la Renault sobre las 6:50

David

Anónimo dijo...

No sé donde tenemos al cuidador de la página.
El desayuno será en Jayena, en el bar El Nota, que está justo al entrar en Jayena desde Fornes o Alhama, a las 8.15.
Jesús

Manuel Díez dijo...

Ya estoy de vuelta del Pirineo y me apunto a Jayena.
Como no tengo coche ire a Torre en el primer bus de Nerja que sale a las 6,30 h. y llega a Torre a las 7 h. Esperarme 5 minutos.

Anónimo dijo...

Ana, te recojo a las 6.30 en el Higuerón.
Paco, ¿a las siete menos diez en la rotonda del Pantano del Agujero? Vamos a probar a llegar a Alhama por Loja. Es un poco más largo pero creo que se puede tardar algo menos.
El "cuidador de la página".

Anónimo dijo...

De acuerdo, estaré esperando en el pantano. Saludos. Paco Ponfe.

biodinamicos del sur dijo...

Jerónimo, hay dos opciones:
-La primera es, nada más pasar Loja, girar a la derecha en dirección al Salar.
-La segunda es seguir la autovía y salir en el cruce de la Moraleda. Esta opción es menos sinuosa. No tienes que llegar a Alhama. Una vez pasado Santa Cruz, te encuentras un cruce, tomas a la izquiera, te lleva hasta el Pantano y de aquí a Jayena.
Buena ruta.
AS

Anónimo dijo...

Lola Valle

Jerónimo ,Paco y yo creo que también estaremos en el pantano(por si cabemos).
Esta noche sobre las doce y cuarto lo confirmo

un abrazo